Villa de diseño arquitectónico con piscina y gran jardín ribereño

Esta villa es muy luminosa. Su ubicación es excepcional. Una gran parcela abierta directamente en las orillas del Lez, sin vistas. También tiene un salón catedral muy grande con un entresuelo. Se puede ver el río desde la entrada. El jardín y la piscina están orientados al sur y bordeados por robles centenarios y un único roble bicentenario junto al río. El río es accesible, y actualmente se está instalando un pontón de 5x5 con vistas al río. La piscina es muy grande y desbordante (11x5) y tiene 2,3 m de profundidad con un elevador hasta 1,4 m y un gran escalón con sólo 10 cm de agua. La terraza es de 3 a 4,5 m de ancho y se extiende hacia la piscina. La habitación central, el salón de más de 80 m2, está abierta al jardín y al río en el otro extremo a través de ventanales de ancho completo. Este salón está dominado en 3 lados por un gran entresuelo. La cocina adyacente al salón tiene una abertura en voladizo que le da una vista de 180° sobre el salón y el jardín. Una villa que amplía los límites visuales. Las habitaciones son espaciosas (de 12 a 16 m2) y todas se abren a la terraza a través de un ventanal doble. Los 3 dormitorios de arriba son grandes y tienen techos inclinados. La parte delantera de la villa es inusual, con un porche y una zona ajardinada con un olivo. La puerta se abre a un pequeño camino privado bordeado de adelfas, con espacio para una docena de coches. La calle es privada y hay numerosas plazas de aparcamiento que siempre están libres. Un sótano con acceso exterior y un garaje doble con acceso directo a la casa completan esta propiedad.